El CRI es una unidad que mide la capacidad de una fuente de luz para reproducir los colores de objetos de manera fiel en comparación a una fuente ideal de luz, o fuente natural, como es la luz del sol.
La reproducción cromática es la capacidad de una lámpara de reproducir colores con la mayor naturalidad posible. Y el sol se configura como la fuente de luz de referencia en este caso. Hablamos de la parte visible del espectro electromagnético que percibe el ojo humano, como ya sabemos, se encuentra aproximadamente entre la longitud de onda de 400 nm y 700 nm. La combinación de todas las longitudes de onda visibles produce la denominada luz blanca. Algo ya comentamos sobre propiedades de la luz en este artículo, pero aquí, tocaremos otras cuestiones.
El CRI (Color Rendering Index), o Índice de Reproducción Cromática (IRC) es determinado en valores desde el 0 hasta el 100, siendo 100 el valor “ideal”. Sin embargo, hay que tener cuidado. La forma en que la industria llega a este resultado es discutida , pues, las escalas comerciales no tienen siempre a la luz del sol como referente y en ocasiones otorgan valores de 100 a fuentes de luz incandescentes, halógenas o incluso LED con temperaturas de color bajo que están a un extremo del espectro luminoso, por ejemplo 4000º K (rojiza) que es muy común. Y esa luz, en en evaluación de color, no representan de ninguna manera una luz perfecta.
Por lo tanto, el CRI será un parámetro más a identificar en el iluminante, siendo el otro la temperatura de color. Trabajaremos, siguiendo la ISO 3664 con luces de entre 5.000 K y 6500 K. Y si deseamos evaluar un original concreto, sería necesario evitar lugares con varias fuentes de luz de distintos tonos porque alterarían el color percibido. Además, la pieza tendrá que situarse delante de un fondo neutro, sin colores: gris, negro o blanco. Y evitar reflejos indeseados.
Si nos preocupamos por escoger iluminantes adecuados, evitaremos el metamerismo de iluminancia. La forma de metamerismo más común, aunque existen más. Se da cuando dos muestras coinciden cuando son vistas bajo un tipo de luz, pero no coinciden cuando son iluminadas por una fuente de luz diferente. Está relacionado directamente con la calidad de la luz, el CRI, pero existen más factores implicados, como son las características de temperatura de la luz y las propiedades de la tinta impresa.
Una forma de evitar esto es usar las barras de control de metamerismo que los catálogos de color Pantone incluyen en todas sus ediciones.
Por lo tanto, a modo de resumen, siempre que estemos visualizando originales donde la valoración del color sea un parámetro decisivo, debemos de controlar el iluminante. Esto sirve para detectar variaciones en los sustratos papeleros y en los colores de las tintas o en la evaluación de impresos.